Guatemala es el segundo mercado de mayor tamaño de América Central, con una capacidad de generación total de 3,2GW. En 2014, produjo 9,8TWh de electricidad, de los cuales el 48% provino de la generación a partir de fuentes fósiles. Las centrales hidroeléctricas de gran escala componen la segunda fuente más importante, habiendo generado el 36% de la electricidad producida. Otras fuentes renovables tales como las pequeñas centrales hidroeléctricas, la biomasa y la geotérmica sumaron un 16% de la producción.
Guatemala lleva a cabo subastas para la contratación de alimentación y potencia eléctricas, en las que puede que se cuente con una proporción fija reservada para fuentes renovables o bien que estas compitan con otras tecnologías. Asimismo, el país ofrece una amplia gama de incentivos tributarios para proyectos de energía limpia, tal como se establece en el Decreto 52-2003. Este incluye incentivos fiscales para los proyectos de energía renovable y exime a los generadores del impuesto al valor agregado y a las ganancias netas sobre equipos importados por un plazo de 10 años. La medición neta también está permitida en el país.
El mercado eléctrico en Guatemala está desagregado, con actores tanto públicos como privados involucrados en la generación, transmisión, comercialización y distribución de la electricidad. El Ministerio de Energía y Minas supervisa la planificación dentro del sector eléctrico, en tanto que la Comisión Nacional de Energía Eléctrica (CNEE) está a cargo del aspecto regulatorio. Por su parte, el Administrador del Mercado Mayorista (AMM), una organización privada, organiza la provisión del sistema basándose en el costo marginal de generación.
Guatemala se encuentra conectada a través del Sistema de Interconexión Eléctrica de los Países de América Central (SIEPAC) con Honduras y El Salvador. En 2014, el país exportó 986GWh a América Central, lo que equivalía a un 106% de incremento respecto de 2013 (478GWh). Este incremento puede ser atribuido a una mayor demanda por parte de sus países vecinos y al exceso de generación de centrales de biomasa en Guatemala. Adicionalmente, el norte de Guatemala se encuentra interconectado con el sistema de transmisión de México.
Desde 2012, la CNEE organiza licitaciones para contratar capacidad eléctrica en las que las energías renovables pueden competir con otras fuentes. Las empresas de distribución son los compradores finales. La primera licitación otorgó 393MW totales entre pequeñas centrales hidroeléctricas (221MW), plantas eólicas (101MW), plantas solares (55MW) y plantas de biomasa (16MW) de un total de 623MW que se ofrecieron en acuerdos de compra de suministro eléctrico a 15 años. En 2014, una segunda licitación se llevó a cabo que inicialmente buscaba contratar 250MW de energía, abierto a todas las tecnologías. La subasta contrató más de lo esperado, un total de 322MW. En esta ocasión, los proyectos eólicos no obtuvieron ningún contrato ya que los proyectos no eran lo suficientemente competitivos, pero otras fuentes renovables (solar, biomasa, y pequeñas centrales hidroeléctricas) consiguieron anotarse con 116MW de los 332MW contratados.
Las subastas han sido el principal motor para la inversión en energías renovables en este país, lo que resultó en un año récord para los fondos destinados a la energía limpia: en 2014, un total de US$702 millones se invirtieron en centrales de biomasa, energía solar, pequeñas centrales hidroeléctricas y parques eólicos.
En 2015, los primeros proyectos subastados comenzaron a entrar en funcionamiento. El primer parque eólico del país, una central de 53MW, fue encargado, en el departamento de Guatemala. Asimismo, dos centrales fotovoltaicas de gran escala (30MW y 50MW) también fueron comisionadas en el departamento de Santa Rosa, aumentando la proporción de energía renovable en Guatemala. La anexión de la nueva capacidad renovable y la cartera de proyectos deberían tener un impacto positivo sobre las tarifas eléctricas, haciendo que estas decrezcan en el largo plazo.
Resumen de Puntuacion
El puntaje general de Guatemala en el Climascopio 2015 fue de 1.40, lo que lo llevó al puesto 18, 11 niveles por encima del lugar que ocupaba en 2014, año en que obtuvo un puntaje general de 1.10.
El puntaje del país fue impulsado mayormente por su progreso en cuanto a la Tasa de Crecimiento de las Inversiones en Energía Limpia que forma parte del Parámetro II Inversiones en Energía Limpia y Créditos para Proyectos Relativos al Cambio Climático.
Con respecto al Parámetro I Marco Propicio, Guatemala obtuvo el puesto 19 en 2015, dos lugares por encima del obtenido el año anterior. Sus puntajes para el Parámetro I en 2015 y 2014 fueron de 1.34 y 1.28 respectivamente.
En el Parámetro II Inversiones en Energía Limpia y Créditos para Proyectos Relativos al Cambio Climático, Guatemala saltó hasta el cuarto puesto en 2015 tras ocupar el puesto 25 en 2014. Su puntaje en este parámetro fue de 1.56 en 2015 contra 0.61 registrado en 2014.
En tanto, en el Parámetro III Negocios de Bajas Emisiones de Carbono y Cadenas de Valor de Energía Limpia, en 2015 Guatemala igualó su resultado de 2014, con un puntaje de 1.22. Los puestos que ese puntaje le otorgó en el Parámetro III fueron el 35 en 2015 y el 34 en 2014.
En el Parámetro IV Actividades de Gestión de las Emisiones de Gases de Efecto Invernadero, el país registró un puntaje de 1.45 tanto en 2015 como en 2014, obteniendo el puesto 23 en 2015 y 21 en 2014.