A la fecha, las políticas de energía limpia de Panamá se han enfocado particularmente en la eólica y la solar, y han incluido subastas discriminadas por tecnología además de beneficios tributarios para ambas. El país también apoya los proyectos de pequeña escala a través de una amplia serie de incentivos tributarios.
Durante la primera mitad de 2014, Panamá cubrió su demanda eléctrica principalmente a partir de fuentes termoeléctricas debido a que una prolongada sequía afectó al país. El 57% de los 4,5TWh generados en la primera mitad del año se generaron a partir de petróleo, diésel y gas natural; el 34% provino de centrales hidroeléctricas de gran escala; otro 6,6% se obtuvo a través de pequeñas hidroeléctricas, y el 2% restante se generó a través de plantas de energía limpia. Durante esta primera mitad del año, también tuvo lugar un incremento significativo la electricidad importada, alcanzando los 176GWh procedentes del Mercado Eléctrico Regional (MER) debido a la fuerte sequía que el país enfrentó. La generación hidroeléctrica repuntó más adelante en el año pero generó una alerta respecto de la necesidad de diversificar las fuentes de generación eléctrica.
La estatal Empresa de Transmisión Eléctrica (ETESA) es la única empresa de transmisión en Panamá y también la que se ocupa de llevar a cabo las licitaciones para adquirir electricidad. Siguiendo el ejemplo de otros países de América Latina, Panamá ha adoptado el sistema de subastas para la contratación de nueva capacidad renovable. El ente regulador Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP) establece lineamientos para las licitaciones y ETESA lleva adelante las subastas. Panamá tuvo su primera subasta de energía eólica en 2011, otorgando contratos a proyectos por 158MW. El país llevo a cabo una segunda subasta de energía eólica en 2013 que otorgó un total de capacidad de 125MW que se prevé entren en funcionamiento para 2019.
El sector eólico también recibe incentivos exclusivos tales como una depreciación acelerada para el equipo relevante y una exención tributaria a 15 años para empresas basadas en Panamá que fabriquen equipos eólicos. En 2014, Panamá convocó su primera licitación para contratos de energía solar, otorgando cinco proyectos que sumaban una generación total de 90GWh anuales, programados para ser comisionados en 2017. En 2015, el país sólo ha organizado una licitación pero en esta ocasión fue para la contratación de capacidad de gas natural, una central de 350MW.
Para pequeños proyectos de hasta 0,5MW, el gobierno de Panamá ofrece exenciones al impuesto al valor agregado (ITBMS) y a los aranceles de importación. Otro beneficio para los pequeños proyectos de energías renovables es una exención de impuestos a la transmisión y distribución para proyectos que no superen los 10MW en capacidad. Los proyectos que posean una capacidad comprendida entre 10MW y 20MW reciben una exención impositiva en sus primeros 10MW de capacidad. En junio de 2012 se adoptó la regulación de medición neta en el país. De acuerdo a dicha regulación, los usuarios minoristas de electricidad que posean instalaciones de energía renovable de hasta 500kW podrán conectarse a la red nacional, entregar su capacidad excedente y recibir un pago por la electricidad excedente suministrada.
En 2011, el país estableció un mandato de mezcla de combustibles del 10% de etanol en la gasolina convencional para 2016. La legislación establecía porcentajes parciales a ser alcanzados cada año, comenzando desde 2013, a fin de poder alcanzar la meta establecida para 2016. Sin embargo, el mandato de mezcla de etanol fue suspendido en agosto de 2014 debido a la insuficiencia de suministro de etanol en el mercado. A pesar de la suspensión del mandato, el gobierno continúa ofreciendo un crédito fiscal de US$0,60 por galón para aquellos mezcladores de combustibles que adquieran biocombustibles.
Resumen de Puntuacion
El resultado general de Panamá fue de 1.31 en el Climascopio 2015, colocando al país en el puesto 21 entre todos los países, bien por sobre el puesto 28 en que se encontraba en 2014, cuando tuvo un puntaje de 1.11.
Su ascenso fue impulsado por mejoras tanto en el Parámetro II Inversiones en Energía Limpia y Créditos para Proyectos Relativos al Cambio Climático como en el Parámetro III Negocios de Bajas Emisiones de Carbono y Cadenas de Valor de Energía Limpia. La fortaleza de Panamá se encontró en el indicador correspondiente a la Tasa de Crecimiento de las Inversiones en Energía Limpia propio del Parámetro II, así como en el indicador correspondiente a las Instituciones Financieras en relación a la Energía Limpia contenido en el Parámetro III.
En cuanto al Parámetro I Marco Propicio, Panamá ocupó el puesto 13, dos por debajo del obtenido en 2014, con un puntaje de 1.48 en 2015. En 2014 había obtenido un puntaje de 1.339 .
En el Parámetro III Negocios de Bajas Emisiones de Carbono y Cadenas de Valor de Energía Limpia, el puesto 33 que logró obtener Panamá en 2015 se encuentra siete puestos por encima del que ocupó el año anterior . Sus puntajes en este parámetro en 2015 y 2014 fueron de 1.27 y 1.02, respectivamente.
En el Parámetro IV Actividades de Gestión de las Emisiones de Gases de Efecto Invernadero, Panamá bajó tres posiciones hasta el puesto 36 en 2015. Los puntajes obtenidos por Panamá en este parámetro en 2015 y 2014 fueron 0.93 y 0.91, respectivamente.